Badmidbar > Números 1:1 - 4:20
¿Qué tiene de especial el desierto?
Esta semana, en la Haftará de esta porción, nos encontramos con el capítulo 2 de Oseas:
Por eso, mira, la seduciré, la llevaré al desierto y le hablaré a su corazón. Desde allí Le daré a ella sus viñedos y transformaré el Valle de Ajor (de la Aflicción) en la Puerta de la Esperanza. Y ella morará allí (tan feliz) como en los días de su juventud y como en el día en que vino de Egipto. En aquel día, dice Hashem, tú Me llamarás Ishí, “mi esposo” y no me llamarás más Baalí, “mi amo”.(Oseas 2:16-18)
¿Por qué leemos justamente esta Haftará en esta semana, en el mes de la entrega de la Torá?
Sin duda, este pasaje en el libro de Oseas es conmovedor y esperanzador. D’s promete un lazo profundo con su pueblo, una unión basada en el amor. El comentario de la Torá Emet (respecto al versículo 18) nos dice:
Ishí y Baalí son expresiones que aluden al lazo conyugal, pero mientras Ishí denota una relación sustentada en el amor y la comprensión, Baalí denota una relación sustentada en el sentimiento de inferioridad que puede experimentar un subalterno ante un superior.
Ya que la entrega de la Torá fue también un pacto eterno entre D’s e Israel, de hecho los rabinos lo compararon con una boda entre Di-s y el pueblo judío, podemos pensar que cuando se trata de un pacto profundo, de hacernos uno con el Creador, el desierto resulta un lugar significativo.
Es que quizá en ese lugar de sequía absoluta, de aparente desamparo, libre de cualquier confort o lujo material, donde podemos empezar a sentirnos vulnerables, ajenos, pequeños. Quizá es en el desierto solamente donde podemos volvernos totalmente dependientes de D’s, donde podemos vaciarnos de cualquier vanidad o altivez y recibir con humildad, con más y mejor predisposición, el pacto de fidelidad eterna con nuestro Creador.
El capítulo de Oseas termina:
Te tomaré como novia para siempre. Te tomaré como novia en mérito a tu honestidad y rectitud, benevolencia y misericordia. Te tomaré como novia en mérito a tu fidelidad. Y conocerás a Hashem. (Oseas 2:21-22)
¡Es nuestro deseo que en estos días antes de la Festividad de Shavuot podamos profundizar en lo que significa este compromiso conyugal con D’s, ojalá deseemos una unión eterna de justa lealtad, aunque debamos ir al desierto para eso!