Vaieshev > Bereshit 27 - 40
Un realista que vive el mundo de los sueños un soñador que quiere vivir la realidad.
Figura sin paisaje, Luis García Montero (fragmento)
Desde siempre los sueños han cautivado a los hombres. Cerrados los ojos, dispuestos a dormir en la noche, nuestra mentes configura mundos y posibilidades extraordinarias.
Muchas veces este mecanismo que tiene nuestro cerebro para procesar la información de la cotidianeidad, es utilizado por D”s para transmitir su mensaje. Ya lo decía el escritor a los Hebreos: D”s ha hablado a su pueblo a través de distintos medios y uno de esos medios son los sueños.
Cuando hablamos de sueños, inmediatamente pensamos en Iosef, el soñador por excelencia. Su sueños le costaron la relación que tenía con sus hermanos, puesto que estos no pudieron entender la profundidad del mensaje que D”s le transmitía a través de Iosef.
Los sueños de Iosef eran una preconfiguración de un realidad futura, una realidad de redención y exaltación espiritual. Asimismo cada uno de nosotros somos como Iosef; todos soñamos con una realidad futura de redención, una realidad en la que el Mesías establezca su Reino de manera definitiva.
Nuestro sueño es el olam habá, la realidad eterna en la que estaremos para siempre con D”s. Y así como sus hermanos rechazaron el sueño de Iosef, muchas veces quienes nos rodean pueden también no entender el profundo y eterno mensaje de la Torá.
No queremos ser realistas que quieran desligarse de su realidad para perderse en el mundo onírico y olvidar lo que D”s nos ha ordenado; pero tampoco queremos ser soñadores que se den por vencidos y se entreguen al mundo material, olvidando también lo que D”s nos ha ordenado. Queremos ser soñadores que viven la realidad, anunciando el sueño eterno de la Torá, de las Buenas Nuevas, de un Olam Habá de redención.
Que D”s nos ayude a vivir por Su sueño.